DIMITE MÓNICA OLTRA

La vicepresidenta de la Generalitat valenciana, Mónica Oltra, ha presentado su dimisión este martes, cinco días después de ser imputada por el presunto encubrimiento del caso de abuso a una menor tutelada por el que fue condenado su exmarido.

La presión de su propio partido, Compromís, y de sus socios de gobierno, tanto PSPV como Podem, ha llevado a Oltra a tomar la decisión de dejar sus cargos institucionales, a pesar de que el viernes había asegurado que no renunciaría. “Me voy con la cara bien alta y los dientes apretados”, ha dicho Oltra, quien ha llegado a la sede de Compromís poco antes de que comenzara la ejecutiva en la que se iba a tratar su situación tras la imputación.

Pese a que la presión ha llegado por varios flancos en los últimos días, Mónica Oltra ha señalado, fundamentalmente, dos: la ejercida por el PSPV y la de los medios de comunicación. Así, ha dicho que se va para no ser responsable de la salida de Compromís de la Generalitat, tras la advertencia velada del presidente, el socialista Ximo Puig, de destituirla si ella misma no se apartaba.

“No será por mí. No voy a comprometer el cambio que se inició en 2015”, ha afirmado Oltra en referencia a los dos gobiernos de coalición progresistas. El hecho de que haya decidido anunciar su renuncia sin comunicárselo previamente a Puig revela la tensión y el malestar entre ambos: “No voy a ser su coartada para que expulse a Compromís del Gobierno”, ha insistido, tras atribuir su marcha a una “infamia judicial y mediática” que “pasará a la historia”.

En una rueda de prensa improvisada, y visiblemente afectada, Oltra ha mantenido su tesis de la cacería política: “Ganan los malos”, ha dicho. “Que nadie piense que es posible hacer política contra los poderosos. A los que van contra los poderosos se los van a cargar con denuncias falsas. Uno a uno”, ha añadido, en referencia al origen de las querellas que la han llevado a los tribunales, presentadas por sectores de la ultraderecha.