El Valencia CF se mete en un problema

El principal objetivo, o el menos malo, de cualquier equipo cuando comienza una nueva temporada de la Liga Santander es la permanencia. El descenso de categoría es algo en el que ninguna escuadra quiere incurrir por lo que supondría ese torpedo en la base de flotación de la entidad. Por presupuesto e historia hay equipos llamados a estar coqueteando con esa zona roja, y pelear hasta la última jornada por la salvación.

En cambio, en cada curso, surgen algunas escuadras que están acostumbradas a cotas mayores, y el verse en esos puestos de peligro puede ser un hecho que no saben sobrellevar. Este es el caso del Valencia CF en la presente campaña.

Para muchos aficionados esta travesía por el desierto era poco más que previsible ya que la política de los dirigentes del club ché ha sido desmantelar el proyecto deportivo de los últimos años. Las salidas de Parejo, Coquelin o Rodrigo Moreno han dejado un hueco irremplazable en el equipo de un Javi Gracia, que a duras penas puede conformar un once inicial con experiencia en primera división.

La lucha por el descenso este curso se presenta frenética tal y como recogen los pronósticos deportivos. El Valencia CF es previsible que este inmerso en esa lucha toda la temporada, viéndose las caras con equipos acostumbrados más a esta tesitura de encontrarse en el alambre cada curso.

A priori, el próximo choque de los de Javi Gracia no invita al optimismo para sumar tres puntos. Su rival será el Atlético de Madrid, un líder sólido que ha hecho del Wanda Metropolitano un auténtico fortín. Los del ‘Cholo’ Simeone están llamados a hacer algo grande este curso, ya que contar con un Luis Suárez en estado de gracia de cara al gol, es sinónimo de garantías. Un hecho que no beneficia a que el Valencia CF pueda obtener algo positivo en su visita a la capital de España.

Aun queda mucha Liga Santander, pero el objetivo de eludir el descenso no se puede dejar todo para las últimas jornadas. El equipo de la ciudad del Turia deberá ir sumando puntos poco a poco para obtener un buen colchón que le permita no tener sorpresas negativas a final de curso.

En definitiva, el Valencia está ante un reto mayúsculo. Hace pocos cursos luchaban por títulos y por conseguir el billete para competición europea, en cambio, en esta ocasión, materializar la permanencia sería una alegría para toda la afición que ha visto como en los últimos tiempos se pone en cuestión la viabilidad del club de sus amores por decisiones un poco controvertidas en todas las esferas del club.