LA DOCUSERIE DE JUSTIN BIEBER SACA A LA LUZ LOS MOMENTOS MÁS DUROS DEL ARTISTA

El 27 de enero se publicaron los primeros capítulos de la docuserie del cantante, Justin Bieber: Seasons. En ella habla de temas muy duros para el artista, muchos de los cuales eran una incógnita para los fans hasta estas últimas semanas. Pero no todo es malo, también veremos los buenos momentos que ha tenido, demostrando que pese a todo lo que ha pasado, también ha tenido etapas de luz.

Justin Bieber pasó por una depresión, tuvo adicción a las drogas, adicción al alcohol y ansiedad. El año pasado le detectaron la enfermedad de Lyme, por lo que no sale de una cuando se mete en otra. Menos mal que llegó Hailey Baldwin para hacerle ver el final de la luz del túnel, y junto con sus seres queridos, consiguió reconducir su vida.

En su docuserie, el cantante cuenta que cuando tenía trece años probó por primera vez la marihuana, a la que se volvió adicto con el tiempo. Eso fue el comienzo de un duro camino: «Hubo un momento en el que me tragaba todo tipo de píldoras, bebía, hacía mi propios hongos y Molly (droga)… Fue un escape. Yo era joven, como todas las personas de la industria y el resto de personas del mundo que experimentan mientras van creciendo. Pero mi experiencia fue ante las cámaras y tuve una exposición diferente. Además de que tenía mucho dinero y muchas cosas», explica.

Tal fue su adicción, que desde que se levantaba por la mañana se drogaba y se empezó a dar cuenta de que se moría, así lo declaró en una entrevista. «Llegó un momento en el que mi equipo de seguridad entraba en mi habitación por la noche para controlar mi pulso. La gente verdaderamente no sabe lo serio que se volvió todo. Fue realmente loco y aterrador. Me levantaba por las mañanas y lo primero que hacía era tomarme algunas pastillas, fumar un porro y después empezar mi día. Todo se volvió aterrador», así lo explica en el documental.