EL PARLAMENTO EUROPEO DA LUZ VERDE AL FONDO DE RECUPERACIÓN

El Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles las normas y reglas necesarias para que los Estados Miembros puedan acceder al fondo de recuperación por la pandemia. El fondo europeo que consta de 672. 500 millones de euros será distribuido por transferencias y préstamos, de los cuales a España le corresponden cerca de 140.000 millones de euros, de los cuales 72.700 son ayudas directas de transferencias no reembolsables.

El reglamento del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (RFF) son las normas que permiten acceder y gastar el dinero de las ayudas por el coronavirus. El pleno ha dado luz verde a este mecanismo con un amplia mayoría de 582 votos a favor, 40 en contra y 69 abstenciones. Este es el primer paso, tras el desbloqueo en diciembre del veto que Hungría y Polonia establecían sobre las ayudas y el presupuesto comunitario por estar sujetas las transferencias de la ayuda al cumplimiento del Estado de Derecho en cada país.

Tras haber sido sorteado el veto y tras la aprobación hoy del Mecanismo RFF, este debe ser aprobado por el Consejo de la Unión Europea, el órgano de representación de los Estados Miembros de la Unión Europea que se espera se produzca a mediados de febrero. Finalmente, los distintos estados deben remitir al Ejecutivo Europeo los planes aprobados en sus parlamentos nacionales relativos a las reformas e inversiones a las que destinarán el dinero transferido del Fondo de Recuperación. Este plazo de valoración será de un máximo de dos meses y se evaluará si de adecuan a los objetivos establecidos y si adoptan las recomendaciones de reforma económica que la Comisión Europea ha realizado en las evaluaciones macroeconómicas.

España, que aprobó por una mínima mayoría el decreto de los fondos de recuperación gracias a la abstención de VOX y el apoyo de EH Bildu, debe abordar una reforma del sistema de pensiones para asegurar la sostenibilidad del este o reformar la legislación laboral para incentivar la contratación indefinida. Sin una de estas dos reformas, España tendrá dificultades para ver aprobado su plan nacional por la Comisión Europea y poder acceder a los fondos de recuperación que tiene asignados.

Mónica Giner González