LA CESTA DE LA COMPRA CONTAGIADA POR LA SUBIDA DEL IPC DEL MES DE ENERO

Sube la gasolina, el diésel, la electricidad, la carne, la fruta, … básicamente todo. El primer mes del año, enero, terminó con una inflación del 6%, según ha publicado el INE el pasado martes 15 de febrero.

Si bien es cierto que el dato es inferior que al de diciembre, cuando fue 6,5%, los expertos no se atreven a asegurar cuando terminará esta espiral de subida de precios y el incremento del coste de vida.

Siempre se habla de la cuesta de enero; pero es que este año es mucho más empinada que nunca. Productos básicos como el aceite de oliva ha incrementado un 30%, la fruta un casi un 9%, la harina un 10,6%, el arroz un 8%, el pan un 5,3%, la ropa un 5%, y muchos más productos que afectan a la cesta de la compra.

Esto supone que los precios llevan más de 10 meses por encima del objetivo del Banco Central Europeo, quienes afirman que se “toman muy en serio las preocupaciones de la gente sobre el aumento de los precios. Usted y todos los ciudadanos de la UE pueden confiar en que utilizaremos todos nuestros instrumentos para estabilizar la inflación en nuestro objetivo del 2% a medio plazo.”

2022 no ha empezado con buen pie, ya que la electricidad seguía en alza y ahora el precio de un barril de petróleo se ha incrementado hasta valer 90 dólares. Asimismo, los continuos cuellos de botella y los problemas en las cadenas de suministros no hacen más que alargar esta situación, que se prevé que dure hasta, al menos, la mitad de este año.

Del mismo modo, la situación sanitaria generada por el COVID-19, ha supuesto la paralización de las fábricas, las esperas en los puertos y la escasez de mano de obra cualificada, lo cual está lastrando al comercio global y generando costes adicionales.