LA RESPUESTA DEL BANCO DE ESPAÑA ANTE LA SUBIDA DE LA TASA DE INFLACIÓN

Tras los datos tan alarmantes del mes pasado, donde la inflación se situaba en un 7,4%, el Banco de España ha tomado la decisión de pasar a la acción. La crisis de la COVID-19, la guerra de Ucrania y Rusia y las tensiones inflacionistas están poniendo en peligro el objetivo de recuperar los niveles de PIB pre pandémicos.

Como bien se ha mencionado, la inflación de febrero alcanzó los 7 puntos. Desde el Banco de España consideran que es el momento de negociar posibles subidas salariales. Según han afirmado, “todos deben perder para poder ganar a futuro. Resulta crucial evitar que se desencadene una espiral de incrementos de precios y costes que solo agravaría los efectos, ya de por si nocivos, de la perturbación actual. Se debe evitar esta espiral puede lograse a través de un pacto de rentas entre empresas y trabajadores.”

 Por otro lado, el dirigente supervisor también se ha hecho eco señalando que “sería deseable que se eviten fórmulas de iniciación automática de los salarios a la inflación pasada o de cláusulas de salvaguardia.” En definitiva, se pretende evitar que los sueldos suban a la par que lo hace la inflación, porque esto tendría como consecuencia una inflación espiral precios-salarios, donde los precios estarían en constante incremento porque los salarios también los están.

Por ello, la deseable sería un pacto de rentas donde se contemplaran los compromisos plurianuales tanto para proteger el empleo como los compromisos explícitos de moderación de los márgenes de las grandes empresas.