CONFLICTO UCRANIA: PUTIN PONE NUEVAS EXIGENCIAS PARA EL FIN DE LA GUERRA

El diario Financial Times asegura que las reuniones de paz entre Ucrania y Rusia han avanzado en gran medida, consiguiendo que Putin acepte un alto el fuego y la retirada de sus tropas de Kiev.

Esto solo se producirá bajo una serie de pretensiones. Una de estas condiciones es que Volodímir Zelenski anuncie la neutralidad de su país, de cara la OTAN y que acepte una reducción de sus fuerzas armadas. Este supuesto acuerdo constaría de 15 puntos, en los que se recogerían esa neutralidad, el fin de sus aspiraciones de entrar en la OTAN, el compromiso de no albergar bases militares de ejércitos extranjerosa cambio de protección, como es el caso de Estados Unidos, Reino Unido y Turquía. Además de estos puntos, el programa incluye: la retirada del ejército ruso, la consagración del idioma ruso en el país (mucha población lo habla abiertamente, mientras el único idioma oficial es el ucraniano) y por último, el reconocimiento de la anexión de la península de Crimea y la región del Donbás.

Mientras avanzan las conversaciones de paz, existen una serie de claves que hacen que Putin se siente a negociar, su mala imagen y la del ejército son el problema. Putin cuenta con un núcleo correoso de colaboradores, ministros y Estado Mayor, quienes han sido incapaces de informar objetivamente sobre el estado real de sus fuerzas armadas, además del pueblo y liderazgo ucraniano. Esto ocurre, ya sea por no contrariarlo tras meses de preparación, o para aprovechar una ventana de oportunidad que se les presentaba única en la reciente historia, o porque literalmente no tenía la información correcta.

A nivel estratégico, no se ha tenido en cuenta la proporción y empleo de las fuerzas requeridas para el tamaño de la operación. La proyección de fuerzas y su estado no han sido la idóneas. Parece que el Estado Mayor tenía la misma impresión de sus doctrinas y estado del ejército que la de sus propagandistas.