EL BARÇA PASA A CUARTOS DE LA CHAMPIONS LEAGUE

El equipo de la Ciudad Condal se jugaba en el día de ayer el billete a Lisboa, donde se disputará la fase final de la gran competición europea. En la ida, el equipo de Quique Setién consiguió un 1-1 en Nápoles, un resultado que dejaba la eliminatoria muy abierta y en manos de nadie. La vuelta tuvo lugar en el Camp Nou en el día de ayer y el equipo catalán no estaba dispuesto a ser apeado otra vez más de la competición europea.

El partido comenzó con dos sustos para el Barça, ya que el Nápoles estrelló un balón al larguero, Mertens aprovechó un fallo de Piqué y estuvo a punto de poner el primer gol en el marcador. Durante los primeros minutos, el equipo italiano fue capaz de robarle la posesión al Barça. Hasta que a la salida de un córner en el minuto 10, Lenglet abrió el marcador con un gran cabezazo que acabó en las redes de Ospina. El gol fue revisado por el VAR, ya que hubo una posible falta sobre un defensor italiano, el árbitro consideró que no hubo contacto suficiente y otorgó el gol.

Este gol despertó al Barça, empezó a dominar claramente y en una jugada increíble de Leo Messi, el argentino puso el segundo en el marcador. A pesar de ser favorecido por los rebotes, Messi superó a varios defensores y puso el balón en la esquina inferior de la portería, siendo imposible de atrapar para Ospina. Antes de terminar la primera mitad del encuentro, Koulibaly fue a despejar un balón dentro del área, Messi muy pillo metió la pierna para hacerse con el balón y el defensor le golpeó la pierna antes de darle al balón, cometiendo un penalti sobre el `10 argentino´.

El colegiado señaló pena máxima, Messi no pudo lanzarlo porque se encontraba mal tras haber recibido una gran patada, así que Luis Suarez lo lanzó y puso el tercero en el marcador. La buena noticia es que Messi pudo completar el encuentro completo. La eliminatoria parecía resuelta, pero Rakitic cometió un error, llevándose por delante al atacante napolitano y cometiendo un penalti. Insigne aprovechó la ocasión y metió al equipo italiano en la eliminatoria con un gol antes del descanso.

Tras el descanso, el Nápoles salió buscando otro gol que les dejara cerca de la clasificación, tuvo varias ocasiones para marcar y asustó de gran manera al conjunto catalán. Hubo un gol de Milic anulado por fuera de juego, más otro larguero a poco del final. El partido finalizó así, pero el Nápoles estuvo a punto de poner en problemas a la entidad blaugrana, que, si quiere realizar un gran papel en la Champions, deberá de mejorar su nivel frente al Bayern. El conjunto alemán ya le espera en Lisboa, tras haberle endosado un 7-1 global al Chelsea y mostrando el nivel que tiene a sus rivales.

CARLOS GONZÁLEZ.